Es interesante comparar como vivían los hombres en el origen y como sus costumbres fueron cambiando con el paso del tiempo y nuevas necesidades.
En aquel entonces, los hombres vivían solitarios, sin lenguaje respondiendo solamente a sus instintos naturales. No tenían posesiones ni obedecían a nadie más que la naturaleza. Pero ya tenían la facultad de querer perfeccionarse, lo que los diferenciaba de los animales. De este modo, se reunieron, comenzaron a hablar y aprendieron a no conformarse con nada de lo que tenían. Esto refleja como el hombre no se satisface cuando consigue lo que quería, cuando hay algo mejor a lo que puede acceder.
Rousseau sostiene que el principio del problema de la desigualdad surge cuando se legaliza el tema de la propiedad privada. En cuanto un hombre cercó un campo y dijo “esto es mío” siendo creído por quienes lo rodeaban, comenzaron los conflictos, clases sociales entre los hombres. Este surgimiento, muestra la manera en que se comenzó a dividir la sociedad. La manera en como nacen individuos privados, es decir, en lugar de que muchas personas cuiden su comida y tierra, cada uno cuida su porción del vecino.
En cuanto a la propiedad privada, Savater designa aspectos tanto negativos como positivos. Hace hincapié en la manera de cómo la propiedad fomenta desigualdad, envidia, codicia, rivalidad entre los hombres. Y la manera en que éstos se identifican por lo que tienen y no con lo que son. Por otro lado, la propiedad privada permite el desarrollo de la independencia, la manera de cómo cada uno decide lo suyo, crea su autonomía.
Según predican algunos santos varones, la abolición de la propiedad privada traería la hermandad entre los hombres. Pero Savater expresa que al ser hermanos habrá que buscar un padre común que sería la Iglesia o el Estado y eso causaría que el individuo quede reducido y obligado a algunas cosas. El autor sostiene que los hombres deberían ser socios leales y cooperativos entre sí e iguales ante la ley.
En mi opinión, es imposible abolir la propiedad privada en la actualidad. A pesar de que sea una fuente de problemas que genera desigualdad es inherente al ser humano querer tener bienes personales y poder desarrollarse, crecer económicamente.
Se debería concienciar desde joven a la sociedad que es importante la propiedad privada pero que también hay otros valores como la solidaridad, fraternidad que generarían igualdad entre los hombres y no seres tan ambiciosos y egoístas.
Esta entrada es del capítulo de Savater, "Las riquezas de este mundo"